La Madre Naturaleza era
adorada desde el Paleolítico. Su culto se extendió lentamente por el mediterráneo,
cada pueblo asimilándola a su manera, arraigando especialmente en Roma.
Cibeles era conocida en
Roma como la Magna Mater.
La Magna Mater, Gran
Madre, Madre Tierra, era una divinidad de origen frigio, cuyo culto arraigó en Roma
desde el siglo III a.e.c. ….La diosa se asocia con la fertilidad, cosechas y
frutos.
Roma adoptó y desarrolló su
culto, reclamando el alistamiento militar en las Guerras Púnicas. Reinventándola
como una diosa de Troya, y por lo tanto una diosa ancestral del pueblo romano
por medio de Eneas. Roma autorizó y promovió su culto. La Mater Magna protegía las
ciudades del Imperio y la agricultura.
Augusto identificó la iconografía
del culto Imperial con la emperatriz Livia como equivalente terrenal de Mater
Magna.
Su templo se localizaba en
el Palatino y su festividad se celebraba el 4 de Abril, las fiestas Megalenses.
Curioso era el ritual religioso
relacionado con la diosa Cibeles, el Taurobolium. Un ritual de sangre con gran
arraigo hasta el siglo IV. Aunque varios con el paso de los años. El devoto se
situaba bajo una plataforma agujereada en una fosa. Sobre la plataforma se
sacrificaba el animal, dejando que su sangre le bañara.
El culto a la Magna Mater tuvo en Hispania gran aceptación, se han documentado una treintena lugares con inscripciones, entre ellos Palencia, Menorca, Córdoba, Mérida, León…..
Atis era la deidad
amante de Cibeles. Su culto se extendió más por el este y sur peninsular.
El museo Magna Mater, se
localiza en Las Cuevas de Soria. Se ha elegido la figura de la diosa Magna
Mater para presentar el proyecto de puesta en valor de tres villas romanas más emblemáticas
de la provincia de Soria: “Los Quintanares” de Rioseco de Soria, “Los Villares”
de Santervás del Burgo y “La Dehesa” de Las Cuevas de Soria.
Villa romana de la Dehesa,
imágenes y más info: http://tarraconensis.com/soria/ladehesa.html