Februarius era el mes dedicado a la diosa Februa, también se cree que el origen del nombre deriva de febrau o febraule, término con que los romanos designaron ciertos sacrificios y ceremonias religiosas que efectuaban los últimos días del año como desagravio a los dioses por los pecados cometidos y por el eterno descanso del alma de los muertos. Era el mes por excelencia de las purificaciones. Tenían lugar grandes fiestas y procesiones en Roma en las que se limpiaba la ciudad de toda clase de inmundicias esparciendo en los lugares limpios sal caliente.
Februa era el festival romano de la purificación, más tarde incorporada a las Lupercales. Posteriormente, el dios romano Februus personificó el mes y la purificación. Este mes fue añadido al final del año por Numa Pompolio. Último mes del año en el calendario clásico republicano y segundo en el Juliano. Se le ponía bajo la protección de Neptuno y se le representaba por una mujer vestida de azul que entre sus manos sujetaba un ave acuática y sostenía en su cabeza un depósito del que salía abundante agua, representando con esto las abundantes lluvias de este mes.
En la mitología romana, Februus era el dios de los muertos y de la purificación. También adorado por los etruscos, Febris, dios que protegía a las personas de la fiebre y la malaria.
Sosígenes fue llamado por Julio Cesar para arreglar el calendario recogiendo el sobrante del cuarto día astronómico, fijó cada cuatro años un día intercalado en febrero, entre el 24 y 25 del mes. El día 24 era el sextus kalendas martii, por eso este día extra fue llamado bis sextus, pero a su cálculo le faltaron 11 minutos, 12 segundos para que fuera exacto y esto dio origen a la reforma gregoriana en 1528.
La Lupercalia era una antigua fiesta de la fertilidad en honor al dios Fauno Luperco, que se celebraba ante diem XV Kalendas Martias, que equivale al 15 de febrero. El rito estaba bajo la supervisión de un grupo de sacerdotes llamado Lupercos que se dividió en dos colegios llamados Quinctillani y Fabiani. En el 44 a.e.c., un colegio, el Iulii Lupercos, que se estableció en honor a Julio César; el 15 de febrero de ese año, Marco Antonio, como su magister, ofreció a César la corona de laurel y el reinado….
Los sacerdotes se reunían en la cueva Lupercal en el Palatino. Según la tradición fue en este lugar donde Fauno Luperco tomando la forma de una loba, había amamantado a los gemelos Rómulo y Remo, y en cuyo honor se hacía la fiesta. La tradición cuenta que allí había una higuera cuyas raíces habían detenido la cesta en cuyo interior se encontraban los gemelos. Allí los sacerdotes sacrificaban unas cabras y un perro al dios Fauno, y con el cuchillo manchaban la frente de los jóvenes Lupercos con la sangre de las cabras. Posteriormente la sangre se limpiaba con lana mojada en la leche, y a continuación, los jóvenes se reían. Después de un banquete ritual, se desnudaban y se vestían con las pieles de cabra. Y con una especie de látigo fabricado con las pieles de la cabras sacrificadas, februa, golpeaban especialmente las mujeres, para que fuesen fértiles o tuvieran un parto sin riesgos. El ser azotado por las tiras de cuero de los luperci equivalía a un acto de purificación, y era llamado februatio. Este rito de purificación comenzó en el reinado de Rómulo y Remo. Después de consultar el oráculo de la diosa Juno, en el bosque Esquilo, ésta respondió: "Madres del Lacio, que os fecunde un macho cabrío velludo".
Ésta celebración la adoptó el emperador Justiniano I en el imperio de Oriente el año 542, como remedio para una peste que ya había asolado Egipto y Constantinopla y amenazaba el resto del imperio.
El Papa Gelasio I abolió la Lupercalia e introdujo la fiesta de la purificación de la Virgen María, llamada la Candelaria en el año 494, para contrarrestar los excesos de las celebraciones paganas y también instauró el 14 de febrero como el día de San Valentín.