El Ayuntamiento de Paterna conservará su yacimiento romano.
La villa romana fue ocupada entre los siglos II y VI. Se han documentado tres fases de ocupación: Alto Imperial, Bajo Imperial y visigoda. A fecha de hoy las catas prosiguen. Se han hallado materiales metalúrgicos, monedas, restos humanos,-dos niños pequeños, de menos de cinco años, enterrados en una de las viviendas-, inscripciones, cerámica...
Se cree que la villa era un latifundio. En el siglo II la inestabilidad política favoreció el éxodo de patricios y comerciantes. Se instalaban en villas próximas a las ciudades. La villa se dedicaba a la explotación de la agricultura y la ganadería; Paterna era una de las despensas de Valentia, a la que abastecía por vía fluvial. Junto al río se distinguen dos zonas: una rústica, dedicada al trabajo; donde se ha localizado un horno, una prensa y tres balsas de aceite. Y una residencial, en la que se vivía; de la que se conservan varias habitaciones, una cocina, las termas y el suelo y las columnas de una basílica paleocristiana.
